Al comprender profundamente qué es valioso para la audiencia objetivo podemos cuidar que nuestras comunicaciones resuenen con sus valores, evitando reacciones inmediatas que resulten polarizadoras. Esto es de particular importancia para la audiencia flexible, pues son quienes tienen mayor probabilidad de convertirse en defensores de ciertas causas de justicia social, pero también corren el riesgo de polarizarse ante mensajes que amenazan sus valores.
A la hora de dirigirse a las audiencias flexibles es necesario tener muy claros los objetivos de movilización que se quieren lograr, ya sea neutralizar antagonistas, activar simpatizantes o atraer flexibles. Una vez definida la audiencia y el objetivo es necesario identificar el conglomerado de valores desde los cuales se relaciona esta audiencia con el problema en cuestión.
Por ejemplo, frente a la causa de reforma a la Policía o ala Fuerza Pública, mencionaremos aquello que es valorado por la audiencia flexible, con el fin de identificar maneras de atraerla:
La creación de mensajes debe buscar puntos de encuentro entre nuestros objetivos y los intereses de la audiencia, articulando mensajes que enmarquen la defensa de nuestras causas dentro de un lenguaje que cuide de aquello que la audiencia valora más profundamente. Continuando con el ejemplo de la reforma a la Policía, a continuación mencionamos algunos ejemplos de mensajes que podrían despertar asociaciones positivas en la audiencia flexible, a la vez que entregan mensajes orientados al apoyo de la reforma.
"Los buenos padres reconocen sus errores":
Este mensaje humaniza a las figuras de autoridad, mostrándolas como capaces de reflexionar y mejorar. Para quienes valoran la autoridad, ver que ésta puede admitir fallos sin perder respeto es poderoso. Sugiere que las instituciones, como la policía, pueden reconocer áreas de mejora sin socavar su legitimidad ni cuestionar su existencia.
"Las autoridades están para cuidar antes que castigar":
Este enfoque apela al deseo de una autoridad benevolente y protectora. Presenta la idea de que la reforma policial no busca debilitar la institución, sino reorientarla hacia un modelo más centrado en el cuidado de la comunidad. Esto puede atraer a quienes buscan un equilibrio entre orden y compasión.
"Es de nuestros impuestos que estamos pagando para que la policía nos proteja":
Este argumento apela al sentido de responsabilidad fiscal y al derecho ciudadano de exigir un servicio de calidad. No cuestiona la existencia de la policía, sino que enfatiza la necesidad de que cumpla eficazmente su función. Esto resuena con quienes valoran tanto la autoridad como la eficiencia gubernamental.
"La autoridad debe ser ejemplo para que sea respetada":
Esta frase refuerza la importancia de la autoridad mientras exige altos estándares éticos. Sugiere que el respeto a la autoridad no es incondicional, sino que se gana a través del comportamiento ejemplar. Esto puede atraer a quienes creen en la autoridad pero también en la integridad y la responsabilidad.
Al enfatizar la responsabilidad, la integridad y el servicio a la comunidad, estos mensajes proponen un fortalecimiento de la autoridad a través de su mejora, no su desmantelamiento. Esto puede generar un amplio apoyo entre aquellos que valoran el orden y la estabilidad, pero también reconocen la necesidad de mejora y evolución de nuestras instituciones.